El programa INAUN realizó festejos de la Primavera en la sede de Santa Rosa. Se realizaron una serie de actividades deportivas y recreativas para los niños, adolescentes y madres que participan del programa.

El coordinador, Federico Camiletti, remarcó que es una costumbre realizar este tipo de festejos con los chicos que visitan la sede y de los barrios donde realizan trabajos. “Hoy se nos suman chicos del Colegio Pablo Freire, otras veces vienen de Vos Podes, porque son instituciones que trabajamos mucho en conjunto. Hay chicos de zona oeste quintas, de Villa Germinal, del Santa María, de Villa Parque, de varios lado, tanto para adolescentes como para grupos de madres”, contó.
Además, informó que el programa tiene una parte preventiva con diversos talleres y remarcó que en los barrios atienden situaciones específicas.

“En total estamos en 250 chicos trabajando. Hay barrios que se trabaja con actividades deportivas que convoca muchos jóvenes. INAUN está compuesto por en equipo técnico de trabajadores sociales y psicólogos, también de un grupo de operadores comunitarios que recorren los barrios y muchos talleristas”, comentó
Actividades deportivas, carpintería, herrería, arte, pintura de murales, macramé, trenzado de pulseras, pinturas de remeras, técnicas decorativas donde se trabaja en lo reciclado, son algunas de las tareas que desarrollan.

“Se trabaja con la población adolescente dentro de lo que es la Dirección de Niñez, trabajamos con chicos y chicas que hayan tenido causa penal, alguna entrada a la policía o demás. A partir de eso, empezamos a detectar la situación de ellos, por qué situaciones están atravesando, que derechos tienen vulnerados, seguramente son chicos que no están escolarizados, que están excluidos de un montón de lugares y lo que se busca es eso, que se los incluya en los barrios, en otras instituciones. Esa es la misión, tratar de que tengan acceso a la escuela, a talleres, para que tengan lugares de pertenencia”, explicó. Por último, se refirió a la importancia de mantener el vínculo con los centros de formación profesional, donde los adolescentes que están cerca de los 17 o 18 años, puedan seguir con una capacitación en alguna tarea específica.